Bluespace y otras opciones de selfstorage

Bluespace y otras opciones de servicios de self-storage. ¿Cuál es su historia?

Si en algún momento has necesitado guardar tus cosas y has visto que te ha faltado espacio, probablemente has pensado en opciones de autoalmacenamiento (también llamado self-storage, por su nombre en inglés). Y como ya hemos explicado en este artículo, aunque es una opción normalmente más cara y nosotros creemos que es mejor aprovechar los servicios de la economía colaborativa que facilita Speizy, sí que tienen sus ventajas en ciertas ocasiones. Pero, ¿cuál es la historia de los centros de self-storage? ¿Cuándo y dónde surgieron y cuánto tiempo llevan implantados en España? ¿Cómo funciona Bluespace? Resolvemos algunas de esas dudas en este artículo.

¿Cuándo y dónde nació la industria del self-storage?

Ya hay evidencias de la existencia del concepto de self-storage en la antigua China, hace más de 2000 años. Los ciudadanos podían almacenar sus pertenencias en botes de arcilla en una especie de almacenes subterráneos. Estos almacenes se mantenían monitorizados y protegidos para asegurar que únicamente el propietario podía recoger sus pertenencias.

Ya en la época contemporánea, existieron ciertas evoluciones de este concepto. Por ejemplo, los bancos ingleses tenían entre sus servicios el almacenamiento de objetos valiosos de sus clientes mientras estaban en ultramar. A medida que las necesidades de almacenamiento se iban incrementando, este servicio pasaron a ofrecerlo otras empresas, y no solamente bancos. Más tarde, en la década de 1850 se abrió el primer almacén dedicado al almacenamiento temporal de objetos personales y del hogar.

De todos modos, no fue hasta la década de 1960 cuando surgieron los servicios de self-storage modernos en Estados Unidos (más concretamente, en Texas). Probablemente ayudó al surgimiento en este estado el hecho de que las casas normalmente no tenían sótano (algo muy común en la mayoría de zonas de Estados Unidos), lo que hacía que existiera una mayor necesidad de espacio de almacenamiento. En lo referente a Europa, la primera apertura de un centro de estas características tuvo lugar en Londres en 1979.

¿Y en España?

Como es habitual, esta tendencia que ya estaba consolidada en otros países de Europa tardó más en llegar a España. No fue hasta el año 2002 cuando un emprendedor de origen austríaco, Alexander Ruckensteiner, fundó en Barcelona una compañía llamada Bluespace, quien hoy es el líder destacado del sector en España.

En los últimos años, el crecimiento del sector (en número de centros) ha sido imparable, situándose en el entorno del 15% anual. Concretamente, en enero del 2019 había un total de 475 centros, y en tan sólo un año se han alcanzado los 544.

Al contrario de lo que se pueda pensar, al tener principalmente el nombre de Bluespace en la cabeza, en España existían a finales de 2019 un total de 262 operadores de centros de autoalmacenamiento, lo que arroja una cifra media de 2,08 centros por operador. Es por lo tanto un sector muy atomizado, en el que Bluespace es el claro líder del mercado, seguido de TuTrastero como segundo operador.

Se trata claramente de un negocio en crecimiento, que se está viendo impulsado por varias dinámicas que le favorecen. Sobre todo, el hecho de que las casas son cada vez más pequeñas y que en muchas casas de obra nueva no se incluyen los trasteros. Además, el incremento del precio de las casas hace que cada vez sean más pequeñas, y se necesite alquilar de espacio de almacenamiento adicional externo al hogar.

Scroll hacia arriba