Para alguien a quien le encanta leer es natural tener una extensa biblioteca personal en casa. A medida que crece la biblioteca de tu hogar es posible que desees almacenar libros de manera segura.
Sin embargo, los libros son muy sensibles y, si no se almacenan correctamente, su estado puede verse afectado. ¿Te preguntas cómo guardar tus libros correctamente? Aquí te vamos a mostrar cómo almacenar libros correctamente, tanto dentro como fuera de las estanterías.
Inspecciona los libros en busca de daños por alimentos o líquidos
No es raro comer o beber mientras se lee. Desafortunadamente, cualquier migaja o residuo de comida que quede en un libro puede dañarlo. Si guardas un libro que ha estado expuesto a alimentos o agua, es posible que se forme moho y éste se esparza por toda tu colección de libros. Para evitar que tus libros se dañen, asegúrate de que estén limpios antes de guardarlos: limpios, desempolvados y listos para ser almacenados.
Envuelve cuidadosamente cada libro
Antes de almacenar tus libros o cualquier artículo del hogar a largo plazo, envuélvelos cuidadosamente en toallas de papel o un material similar, o plástico de burbujas para evitar daños en la cubierta o que los libros se peguen entre sí. Esto ayudará a proteger tu colección de cualquier daño causado por la suciedad o el polvo.
Usa un Contenedor de Almacenamiento
Luego encuentra una caja que sea del tamaño correcto. Busca recipientes de plástico que sean impermeables. Evita reutilizar las cajas que se usaron anteriormente para almacenar alimentos, ya que pueden atraer ratones o insectos que destruirán las páginas de papel de tus libros.
Recomendamos guardar los libros en un recipiente de almacenamiento de plástico. Esto ayudará a proteger aún más tus libros de la humedad, el polvo, los insectos y las alimañas.
Es mejor almacenar libros verticalmente
Llena las cajas poniendo cada libro envuelto y apilando los libros más pesados en el fondo de la caja. Pon también algunos paquetes pequeños de gel de sílice dentro de las cajas; puedes guardarlos de otras compras para momentos como estos. Una vez que las cajas estén llenas y bien empaquetadas, ciérrelas o séllelas con cinta de embalaje libre de ácido.
Los libros también se pueden almacenar en posición vertical con el borde del papel hacia arriba. Este método ayuda a proteger la forma de los libros al permitir que los libros se apoyen entre sí. Ten cuidado de no meter demasiados libros en una caja, ya que los lomos de los libros podrían deformarse.
Utiliza un lugar de almacenamiento de clima controlado para el almacenamiento a largo plazo
Ahora averigua dónde colocar tus cajas. No guardes libros en el sótano porque puede estar demasiado húmedo y la humedad puede fomentar el crecimiento de moho. También debes evitar cualquier área que se inunde con frecuencia o experimente temperaturas extremas. El calor extremo puede hacer que las encuadernaciones de los libros se derritan o se agrieten. Un lugar ideal es un sótano o un armario que esté bien ventilado y con temperatura controlada entre 18 y 21 grados Celsius. Coloque las cajas en un estante (en caso de posibles fugas de agua).
Una de las mejores maneras de preservar la calidad de tus libros es guardarlos en una unidad de almacenamiento con clima controlado. Una unidad de almacenamiento con clima controlado mantendrá un rango constante de temperatura que es ideal para almacenar los artículos más sensibles.
Revisa tus libros
Lo peor que puedes hacer al almacenar artículos delicados es almacenarlos a largo plazo y olvidarte de ellos. Pon un recordatorio en tu teléfono o planificador para revisar tus contenedores de almacenamiento de libros. Si hay daños, querrás solucionarlos de inmediato para proteger tu colección.
Lo que debes y no debes hacer al almacenar libros en estanterías
Uno de los mejores lugares para guardar los libros es en una estantería en tu casa. Si tienes la suerte de tener espacio suficiente ésta es la forma correcta de almacenar libros en una estantería:
- Coloca una estantería cerca de una pared interior con suficiente espacio para permitir la circulación de aire. Colocar un estante junto a una pared exterior puede causar que la temperatura fluctúe demasiado.
- No amontones los libros demasiado apretados en un estante ni los coloques de manera que queden inclinados en el estante.
- Mantenlos alejados de la luz solar directa, ya que puede desteñir las cubiertas.
- No quites las sobrecubiertas, están destinadas a ayudar a proteger las cubiertas de los libros.
- Mantén los libros y sus lomos libres de polvo. Con el tiempo, los elementos ácidos del polvo pueden dañar el papel.
Múltiples mudanzas, situaciones de vida temporales, falta de espacio o almacenamiento, o simplemente el volumen pueden hacer necesario que empaques tus libros de vez en cuando. Si ese es el caso, no cometas errores de novato que podrían provocar que tus lecturas favoritas se deformen o se dañen irreparablemente.